ME VOY DE VACACIONES

- Qué, ¿dónde te vas de vacaciones este año?
- Este año me voy a dar la vuelta al mundo. Voy a recorrer las 7 maravillas. Haré escala en cada una de ellas cada día y disfrutaré de ellas cada noche.
- ¿Y eso? ¿Te ha tocado la lotería y no me lo has contado?
- Sí me tocó, pero creo que te lo comenté. Me tocó la lotería contigo, porque me siento la mujer más afortunada del mundo.
Cada día de la semana recorreré un lugar en concreto y así lo repetiré cada día del mes. Como un nuevo viaje a cada parte del mundo junto a ti.
El lunes iré a visitar el Taj Mahal en tus ojos. Será como estar, a través de tu mirada, en la India. Allí donde soy capaz de encontrar la paz, donde veo la respuesta a todas mis dudas. Pero no dejes de mirarme con los ojos que me miras o sentiré que estoy en el sitio equivocado, en la ciudad equivocada.
El martes apareceré en China y haré los 21.196 km2 a través de tus labios, a través de tus besos. Un recorrido que será en equipo como una carrera de relevos. Mientras que nuestras bocas se funden en apasionados besos lo haremos juntos, pero después nos separaremos. Primero uno recorrerá la distancia a besos del cuerpo del otro y después será al contrario. Así sé que tardaremos una vida entera en recorrerla y hasta que no la terminemos no podremos separarnos.
El miércoles pasaré del continente asiático a Sudamérica e iré a visitar el Chichén Itza en México. Recorreré cada centímetro de tu cuerpo con mis manos, como si recorriese cada uno de los escalones de ese tempo dedicado a la divinidad más importante de la cultura Maya. Ese cuerpo que para mí es el mayor tesoro divino que puedo tener a mi lado. Y que a su vez, alberga la siguiente maravilla que visitaré.
Esa siguiente maravilla del mundo, la de los jueves, será en Brasil, en Río de Janeiro. Es la estatua de Cristo Redentor, situada en la cima más alta de ese país. Para que desde cualquier punto puedan ver su gran belleza y pueda proteger a toda la ciudad. Así es tu corazón, lo más grande de ti, tu esencia y lo más importante que tienes. Y desde ahí es donde yo me siento más protegida y querida por ti. Es lo que siempre voy a cuidar y voy a tratar de no perder y hacerlo feliz.
El siguiente país al que me acercaré los viernes, será Perú para poder ver el Machu Pichu. Deseo poder tumbarme sobre esas montañas tan espectaculares, como es tu pecho y poder descansar en ella cada noche. Donde pueda escuchar los latidos de tu corazón. No podría tener mejor almohada para poder seguir soñando contigo.
El sábado volveré a Asia para poder visitar y estar dentro de Petra, esa ciudad excavada y esculpida en la piedra en Jordania. Cuyas columnas y altura es inmensa, tanto como lo que yo siento cuando tus brazos se entrelazan con mi cuerpo. Sus columnas me recuerdan a la forma de tus brazos, marcados, grandes y fuertes. Tus abrazos hacen que mi cuerpo tiemble al sentirte tan cerca. Pero también hacen que me sienta protegida por ti. Quiero que cada noche sean ellos quiénes me protejan de ese viejo monstruo que vive dentro del armario.
Y por último y para terminar la semana, el domingo regresaré a Europa, más concretamente a Roma. A esa ciudad que me enamoró cuando la vi por primera vez y que me hizo sentir cosas especiales, como haces tú cada vez que estamos juntos o hablamos. Entraré en el Coliseo Romano y lucharemos como los gladiadores entre nuestras sábanas. Daremos rienda suelta a la pasión con tu mejor arma hasta morir de placer, como aquellos luchadores que luchaban hasta el último aliento.
Éstas serán mis mejores vacaciones, en las que no desharé la maleta para no tener que irme nunca de tu lado, aunque cada noche recorra una parte del mundo. ¿Me acompañas?